Hoy os traemos una receta muy rápida de hacer, muy nutritiva y muy energética. Ideal para tener un aporte extra de energía por ejemplo antes de entrenar.
Es increíble como con tan poquitos ingredientes conseguimos un snack tan saciante, saludable ¡y delicioso!
Para esta receta vamos a usar una base de avellanas, aunque podéis sustituirlas por cualquier otro fruto seco que tengáis por casa (almendras, nueces, anacardos…). Incluso, podéis añadir algún otro ingrediente, en este caso hemos añadido de forma opcional maca en polvo, (aporte extra de minerales) y canela (antiinflamatorio natural y sustituto del azúcar).
Hemos elegido las avellanas tostadas, además de por su sabor, por ser un gran aliado en momentos de sobreesfuerzo físico, gracias a su alto contenido en proteínas de buena calidad (13,7g por cada 100) y grasas muy beneficiosas para nuestro cuerpo como lo son el ácido oleico y el ácido linoleico, que nos ayudan mantener una buena salud cardiovascular.
Los dátiles son un endulzante natural, pero tranquilos porque estos azúcares naturalmente presentes en el dátil son de muy fácil asimilación y que unidos al aporte de vitamina B5 lo convierte en un preciado reconstituyente en casos de esfuerzo físico y mental.
Las semillas de sésamo son muy poderosas y no todo el mundo lo sabe, pero entre sus nutrientes destacados encontramos el calcio (975mg por cada 100g) siendo un gran aliado para aquellas personas que no consumen alimentos de origen animal. También tienen una gran cantidad de proteínas (17g por cada 100) además de hierro y otros minerales y vitaminas del grupo B.
¿Qué vamos a necesitar?
Ingredientes para 16 bolitas aproximadamente
125 gr de avellanas tostadas
125 gr de dátiles al natural
25 gr de sésamo
25 gr de aceite de coco
15 gr de cacao puro
INGREDIENTES OPCIONALES
15 gr maca en polvo.
5 gr de canela en polvo.
Elaboración
1. MOLER LAS AVELLANAS
Lo haremos con la ayuda de un procesador de alimentos, para que queden bien troceadas, con textura arenosa.
2. DESHUESAMOS LOS DÁTILES
Lo hacemos con la ayuda de un cuchillo y los incorporamos al procesador de alimentos junto con el resto de ingredientes secos.
Mezclamos bien para que quede todo bien integrado. Veréis que la mezcla ya empieza a coger “humedad” gracias a los dátiles.
3. INCORPORAMOS EL ACEITE DE COCO.
Mezclamos de nuevo y ya casi estaríamos. Ahora ya sólo queda la parte más divertida.
4. ¡HACER LAS BOLITAS!
Ayudándonos de cuchara pequeña cogemos la cantidad apropiada para el tamaño de la bolita, colocamos la cantidad en la palma de la mano y cerramos suavemente el puño apretando la mezcla para compactarla y le damos forma poco a poco con los dedos y con las manos.
5. A ENFRIAR
Una vez terminadas las bolitas hay que meterlas en la nevera un mínimo de 30 minutos para que se endurezcan.
El aceite de coco es el encargado de endurecer la mezcla, ya que a bajas temperaturas este aceite se solidifica, es por eso (y por otros motivos) que este aceite es muy bueno para el sistema cardiovascular.
¡Y listo! Ya tenemos nuestras bolitas energéticas listas para comer… una o dos antes de hacer ejercicio, o entre horas si te entra hambre.
Esperamos que pongáis esta receta en práctica y si os ha gustado hacérnoslo saber mandándonos una foto o etiquetándonos en RRSS